Por Ramiro Estrella
Numerosos aficionados y expertos del béisbol profesional dominicano continúan perplejos y cuestionando los motivos detrás de la reciente derrota del equipo de Las Estrellas Orientales en la Serie Final ante los Tigres del Licey.
A pesar de contar con una alineación estelar que destaca por su formidable cuerpo de lanzadores, poderoso bateo y sólida defensa, la repetición de resultados adversos en momentos cruciales deja a muchos desconcertados.
Las Estrellas Orientales han demostrado su capacidad para clasificar a la postemporada en cuatro ocasiones seguidas, de las cuales tres han sido a la Serie Final, pero lamentablemente, han fallado en obtener la victoria.
Este patrón negativo contrasta con otros conjuntos de la Liga Dominicana de Béisbol Profesional Dominicano (LIDOM), como los Tigres del Licey, las Águilas Cibaeñas, los Leones del Escogido, los Gigantes del Cibao y los Toros del Este. Estos equipos, a pesar de su ocasional demora en alcanzar una Serie Final, logran triunfar cuando llegan, mostrando una destreza para superar obstáculos.
Para Las Estrellas, la dificultad para coronarse campeón ha persistido a lo largo de los años, habiendo logrado la hazaña solo en tres ocasiones, siendo la última vez después de más de medio siglo.
Tras tantos tropiezos deportivos, se levanta la sugerencia de que la directiva del equipo debería considerar seriamente la posibilidad de contratar a un especialista en cambio de mentalidad, debido a que ni los directivos ni los propios jugadores parecen tener la convicción de que pueden conquistar un campeonato, a pesar de contar con un talentoso plantel.
Las Estrellas Orientales siempre empieza bien y termina mal, creando frustración a una de las mejores fanaticadas, que lo apoyo siempre, a pesar de la poca veces que ha ganado, por lo que, la contratación de un especialista en cambio de mentalidad podría ser la clave para transformar la dinámica y otorgarle a ese equipo la confianza y la determinación necesaria para romper con la racha de derrotas en las series finales.
El autor es periodista y estudiante de Derecho
