Pues, señala el colega que luego que termino la Cumbre Latinoamericana de periodistas celebrada en un hotel de aquella localidad, se trasladó con el periodista Argentino Osvaldo García Napo a la playa y que una vez estando ambos luego de haber recorrido unos minutos, dos de los llamados “Meseros” los invitan para que disfruten una deliciosa comida.
Pues, al ver el menú ambos decidieron comerse un chillo, pez que para ellos es sumamente delicioso, pero tremenda sorpresa se llevan cuando al pedir la cuenta , por un lado unas de las dos decia ochocientos cincuenta pesos, (RD$ 850.000), y la otra mil ochocientos pesos, (RD$ 1,800.00).
Tremendo abuso que cometieron los dos meseros contra estos dos periodistas internacionales. Una gran estafa y por tando no puede quedar asi, las autoridades deben investigar a esos dos leones estafadores.
Pero es inconsevible, que a un periodista o cualquier ser humano unos delincuentes a plena luz del día en la playa intenten venderle drogas u otra sustancias narcóticas.
La Dirección de Control de Drogas, DNCD, o Narcótico de la Policía Nacional, no pueden quedarse con los brazos cruzados bajo ningún aspecto ante este violatorio, bochornoso, vulgar y por demás criminal acto, contra un periodista Argentino que lo único que hizo fue venir de un país tan lejos para que nosotros los periodistas dominicanos aprendieramos de su experiencia.
